Definitivamente i miei ragazzi hanno imparato alcune parolacce italiane. Indubbiamente è colpa mia, lo ammettto, non lo posso certo negare. Senza voler giustificarne l’uso, bisogna riconoscere però che la capacità di dire parolacce (e in maniera convincente) è una grande abilità e un indizio di solidarietà con i parlanti dell’altra lingua. Per quanto si sappia bene una lingua è comunque molto difficile che si riescano a usare correctamente le parolacce. Come ho letto in un libro: “le parole sono quelle, ma manca la musica”.
Diario de experiencias familiares sobre el bilingüismo. Diario di esperienze familiari sul bilinguismo
1 sept 2013
Más palabrotas / Ancora parolacce
Definitivamente mis chicos han aprendido algunas palabrotas italianas. Eso sí ha sido culpa mía, lo admito, no lo puedo negar. Sin querer justificar el hábito, hay que reconocer que la capacidad de decir palabrotas (y de forma convincente) es una gran habilidad e indicio de solidariedad con los hablantes de ese idioma. Por muy bien que se sepa un idioma es muy difícil que se consiga utilizar palabrotas del todo bien. Como leí en un libro: “las palabras son ésas, pero falta la música”.
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